Al igual que otras partes de nuestro organismo, la cavidad bucal y piezas dentales están pobladas de bacterias. Estos microorganismos realizan funciones de protección frente a otros microorganismos patógenos y agentes externos, pero también son causantes de la formación de placa dental al mezclarse con proteínas y restos de alimentos.
Hasta ahora, la secuenciación de ADN nos permitía saber que bacterias habitan en nuestra boca. Pero un estudio, realizado por investigadores del Instituto Forsyth de Cambridge, ha ido más allá al localizar el lugar exacto en el que se encuentra cada bacteria formadora de placa y saber cómo interactúan entre ellas creando un “Mapa Bacteriano de la Placa Dental.”
La técnica de imagen utilizada es el uso de microscopía de fluorescencia y secuenciación del ADN. Aplicando un reactivo fluorescente en la placa dental se tintan de verde las bacterias del género estreptococo y de magenta las cornybacterium. Esto crea un “mapa brillante” muy visual al microscopio mostrando complejas estructuras a las que se ha llamado “erizos”.
Este avance permitirá poder conocer mejor como están organizadas estas bacterias en nuestra boca y qué papel juegan en nuestra salud, no solo bucal sino general. Además de aportarnos más datos sobre su comportamiento y cómo poder actuar sobre ellas.